231. LOS SUEÑOS DE LITTLEISDRAWING VOL. II

Dear Suzie Marlango,

Hace algunos meses te hablé del Proyecto Sueño, ese maravilloso proyecto de Littleisdrawing en el que ella publicaba dibujos de sus sueños para que la gente los interpretara a su manera mediante un texto (véase entrada 213). En este tiempo he estado enviándole algunos textos y, como no resultaban seleccionados, los he reutilizado para la sección Pie de foto con alguna de esas fotos geniales que se encuentran escondidas por la red.

Pero esta vez es distinto porque, aunque no han sido seleccionados, los textos que he escrito para sus dos últimos sueños no tienen razón de ser sin el propio dibujo, por eso me he tomado la licencia de subirlos aquí junto a los dibujos para los que fueron escritos originalmente... y yo lo seguiré intentando con los próximos sueños. Estoy bastante orgulloso de ellos y me daba pena que se quedaran olvidados en un cajón. Eso sí, no te pierdas la oportunidad de leer los dos textos de verdad, los que Carla ha elegido para las imágenes... son una pasada, y uno de ellos está escrito por mi admiradísima Lourdes Hernández. No te digo más. Puedes leerlos en la página del SUEÑO#PROJECT

Y sobre mis textos... espero que te gusten!

JUGO DE PULMÓN

Te veo marchar. Estoy solo. Abandonado en una estación de tren de una ciudad extranjera. Dolor. Incredulidad. Tokio no me quiere. ¿Qué pensarán los que me están viendo llorar? Siempre me ha fascinado la gente que es capaz de llorar en sitios públicos y ahora soy uno de ellos. Patético. El desamor se me ha metido en el pecho, me ahoga… no puedo respirar. Desearía que en la máquina de bebidas, entre el capuccino y el té verde, hubiera un poco de jugo de pulmón que me devolviera el aire. Jugo de pulmón en vaso de cartón para los males del corazón… es eso, o cianuro. No veo otra salida.  

BYPASS

El arte es un bypass entre cabeza y corazón. No basta con entender… hay que sentir.  Puedes pasar horas delante de una pieza. Conociéndola. Tratando de comprender sus secretos... pero si no te llega al corazón, si no te provoca un escalofrío de placer al verla por primera vez, no te esfuerces. Esa obra de arte no está hecha para ti.